Todo apunta hacia los coches eléctricos. ¿Sabes cuales son sus ventajas?

El futuro del automóvil es eléctrico. Eso dicen y ese camino se ha tomado. Las administraciones planean, desarrollan y ponen en marcha diversos protocolos ‘anticontaminación’ cuyo objetivo es potenciar la compra de vehículos respetuosos con el medio ambiente.


Los fabricantes invierten grandes cantidades de dinero en la creación de tecnología de vehículos eficientes e incluso, hay ciertas marcas que han anunciado que sus gamas estarán completamente electrificadas.

Con electrificadas quieren decir ‘híbridos y eléctricos’. Hoy día, tal y como está la tecnología, apostar únicamente por la electricidad es un riesgo. Obviamente, Tesla Motors es un ejemplo de fabricante de coches eléctricos en exclusiva, pero sus ganancias son ajustadas (y vende coches de 90.000 euros para arriba, hasta que llegue el Model 3). A Tesla se unirá dentro de poco smart, pues oficialmente sólo fabricará coches eléctricos a partir de 2019 y existen otros fabricantes como Faraday Motors, pero son insignificantes frente al grueso que está por venir y frente  a las marcas tradicionales, con unas ventas anecdóticas.

Coches eléctricos
Tesla Model S

Veremos que tal le van las cosas a smart a partir de 2019 pero, por ejemplos, Jaguar y Land Rover son de esas marcas que han anunciado una electrificación total. Volvo también se ha propuesto fabricar únicamente modelos electrificados. Mercedes ha creado una submarca, ‘Q Class’ para la puesta en escena de automóviles eléctricos y BMW, fabricante que lleva tiempo apostando por la electrificación y eficiencia, ha presentado un plan estratégico donde figuran nada menos que 25 coches electrificados. ¡Incluso Lamborghini tendrá eléctricos! Y todo este irá sucediendo de aquí a 2025. Poco a poco. Pasito a pasito.

Se puede comprobar que la cosa va en serio, que de aquí a unos años la importancia y el peso en ventas de los coches eléctricos será real. Se puede ver con sólo salir a la calle, donde cada día te cruzas con más modelos híbridos (la mayoría Toyota). Además, si hacemos caso a los diferentes estudios a nivel global, nos encontramos con una previsión de ventas respecto al coche eléctrico, que abarca del 30 al 35% del total en 2040.

Tomar de carga coche eléctrico

A simple vista estamos muy lejos del 2040. Pero sólo tenéis que echar la vista atrás para daros cuenta de lo rápido que pasa el tiempo. Estamos acabando 2017, cuando hace nada leíamos en la prensa los ‘terroríficos efectos’ que tendría la llegada del año 2000. Hemos vivido en España un total de ocho planes PIVE desde 2012 y,. ojo a esto, fue el 19 de septiembre de 2015 cuando se destapó el caso de los motores manipulados por Volkswagen, por la EPA estadounidense.

Con cifras en la mesa, podemos comprobar como en los siete primeros meses de 2017, se vendieron 3.636 unidades totalmente eléctricas. Supone un aumento del 33,3% respecto al mismo periodo de 2016. Si nos fijamos en los coches híbridos, la cifra asciende hasta los 5.091 vehículos matriculados sólo en julio. Un 73,5% más que en el mismo espacio de tiempo que en 2016. Las matriculaciones de modelos con mecánica híbrida en los siete primeros meses de 2017 asciende a 32.072 unidades. Una subida del 90,6%.

Coches eléctricos
Hyundai Ioniq eléctrico

Los híbridos tienen claramente más tirón en el mercado frente a los eléctricos, sólo hay que ver el nivel de ventas. Este tipo de automóvil con ‘motor combinado’ se ha posicionado como la alternativa al diésel y de cara a los conductores, contar con el apoyo de un motor de combustión es una garantía y ofrece tranquilidad. Principalmente por la infraestructura disponible, extensa y bien establecida, así como lo poco que se tarda en repostar en una gasolinera. sobre todo frente a un eléctrico.

Cuesta un poco creer en los estudios y estadísticas. Es más, cuesta no sacarle contras a los coches eléctricos, aunque sus ventajas son muchas. Más de las que parecen a simple vista. Necesitan algo de evolución y el apoyo de los gobiernos, así  como de terceras empresas. Pero hay un primer paso que parece no estar siendo correctamente dado para que los compradores consideren un eléctrico frente a un coche convencional.

Coche eléctrico
BMW i3

Por un lado, la publicidad y la imagen de estos coches necesita ser potenciada. Eso es tema de marcas y de gobiernos, pero también de las diferentes empresas que trabajan con ellos y sí, de los concesionarios. Sobre todo de estos últimos.

El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital acaba de presentar el Plan MOVALT (plan de apoyo a la movilidad alternativa) para incentivar la compra de coches con motores alternativos. Para la ocasión, se destinan 20 millones a la compra de coches con motor eléctrico, híbrido enchufable, gas y pila de combustible. Los gasolina, diésel e híbridos convencionales quedan fuera. Ayudas de entre 500 y 18.000 euros según el tipo de vehículo y su motorización. Además, se destinan 15 millones adicionales para el desarrollo e instalación de infraestructura de recargas.

Eléctricos
Renault ZOE

Por tanto, ya hay una base sobre la que trabajar. Los incentivos y ayudas a la compra son vitales. Personajes como Carlos Ghosn, CEO y presidente de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi así lo cree.


  • ‘Las ventas de vehículos eléctricos no están siendo impulsadas por la demanda de los consumidores. Para que estas ventas aumenten son necesarias regulaciones e incentivos por parte de las administraciones y ofertas por parte de las empresas, que empujen al consumidor a decantarse por este tipo de coches’.

Con el Plan MOVALT en marcha le toca el turno a los concesionarios para que todo sea más fluido y sencillo. Pero, ¿sabemos vender coches eléctricos? ¿funcionan los métodos tradicionales? ¿conocemos las ventajas de un coche eléctrico?

Coches eléctricos
Bastidor de un coche eléctrico (BMW i3 con ‘range extender’)

No sirven los convencionalismos ni los métodos para vender la nueva hornada de automóviles ecológicos. Estamos en la era digital, todo el mundo tiene información y las principales pegas de un coche eléctrico son grandes: carga y autonomía. Será la primera cuchillada que soltaría cualquier cliente, así que vamos a enumerar algunas ventajas con las que contrarrestar las pegas.

  • Silenciosos. Los motores eléctricos son extremadamente silenciosos. Emiten un zumbido, sí, pero es tan mínimo que apenas es perceptible. No vibran, no emiten calor. Son muchísimo más cómodos.
  • Costes de uso. Respecto a un coche convencional, pueden ser hasta seis veces más baratos ya que el coste de la electricidad es bastante menor que el precio del crudo. Hay modelos capaces de recorrer 100 kilómetros con poco más de un euro (un automóvil convencional ese coste puede rondar entre 5 y 10 euros).
  • Muy buena aceleración. El motor eléctrico es lo que se llama ‘motor de par constante’. Es decir, siempre funciona al máximo de su capacidad, ofreciendo la misma cifra de par SIEMPRE. Por eso, su aceleración es sencillamente brutal. Puede parecer baladí, pero una respuesta instantánea, puede sacarnos de muchos aprietos.
  • Habitáculo más amplio. Un motor eléctrico es mucho más pequeño que uno de combustión y, por lo tanto, ocupa menos sitio. Puede estar incluido en el propio eje de las ruedas, permitiendo aprovechar el espacio que queda libre para el habitáculo.
  • Seguros más baratos. Si bien es cierto que depende de muchos factores, hay aseguradoras que ofrecen precios especiales para coches eléctricos, porque las reparaciones son algo más baratas.
  • Menos posibilidad de averías. Un coche eléctrico es menos complejo que uno con motor convencional y sufre mucho menos estrés en sus componentes. Esto hace que las posibilidades de averías se reducen considerablemente. Además, tiene un 60% menos de piezas respecto a los coches ‘normales’ y eso al final influye.
  • Aparcamiento gratis. En ciudades como Madrid o Barcelona, los coches eléctricos pueden aparcar en zonas de estacionamiento regulado totalmente gratis. Tampoco se ven afectados por los cortes de circulación
Coches eléctricos
Motor eléctrico de rueda

Un apartado importante que debería destacarse es el mantenimiento. La diferencia técnica hace que el mantenimiento de cada vehículo sea completamente distinto. Por ejemplo, no hay que cambiar aceite, ni filtros. Tampoco hay correa de distribución ni embrague, que son de los componentes de desgaste más caros en cualquier vehículo. Como ejemplo, un cambio de correa de distribución tiene un precio medio de entre 400 y 500 euros, mientras que un embrague ronda las mismas cifras.

Hay estudios que han demostrado que con un coche eléctrico se reducen entre un 40 y un 55% por los costes frente a uno convencional. Las baterías tienen garantías de larga duración, los fabricantes ofrecen programas especiales para estos vehículos que los hacen más interesantes…

Los coches eléctricos son el futuro, como decíamos al principio, pero tenemos que saber cómo venderlo, como decirle a la gente que estos coches no tienen tantos problemas como se dicen en internet y que realmente, merecen la pena. Se ha demostrado que un ciudadano español medio no recorre más de 50 ó 60 kilómetros diarios. Distancia más que cubierta con los nuevos modelos eléctricos con autonomías de hasta 200 kilómetros.